Hace casi un año decidí lanzarme a la piscina de escribir un largo. Hoy, por fin, ya tengo terminada la primera versión completa. Ha sido una experiencia brutal por ver lo difícil y complejo que resulta, desde la estructura maestra hasta el más simple de los diálogos, siempre llenos de subtexto.

Se trata de un drama juvenil: dos jóvenes de distintas ciudades de España se enamoran tras pasar un día juntos en Madrid y deciden apostar por la relación, aun cuando ella va a pasar todo el verano a 6.000 kilómetros de él.

El amor en la distancia es un tema que ya se ha tratado de mil y una formas, desde la comedia moderna (Salvando las distancias) hasta la tragedia más melodramática (El diario de Noah, Querido John), pasando por la tragicomedia más agridulce (One day) y, recientemente y aquí en España, por la crudeza más costumbrista (10.000 kilómetros).

Mi guion propone un conflicto cercano, al tratarse de dos adolescentes (cerca de los veinticinco años) con vidas normales y reconocibles, pero que pertenecen a dos mundos y estilos de vida muy distantes.

El título corresponde a un verso de Romeo y Julieta, de Shakespeare. Y es que resulta que uno de los puntos en común de los dos protagonistas es la pasión por el teatro. A ella le encantan los clásicos; él se dedica a la improvisación. Estos son los versos en cuestión:

JULIETA
Bien; no jures; aunque eres mi alegría,
no me alegra el pacto de esta noche;
es demasiado brusco, demasiado temerario,
demasiado repentino, demasiado semejante al relámpago,
que se extingue antes de que podamos decir: «¡El relámpago!…»
¡Cariño, buenas noches!
Este capullo de amor,
madurado por el hálito ardiente del estío,
tal vez se haya convertido en flor galana
cuando volvamos a vernos.

Si eres de alguna productora o tienes interés en leer el guion, no dudes en contactarme!